Vamos a comparar de manera general los rasgos principales de las dos pirámides nutricionales. Comprobamos inmediatamente que la pirámide paleolítica es mucho más rica en proteínas y tiene menor contenido en carbohidratos que la dieta correspondiente a la pirámide tradicional. Tiene un inadecuado balanceo entre los ácidos grasos.
El omega-6 presente en los aceites vegetales y en alimentos procesados pueden ser perjudiciales cuando se consumen en detrimento de los omega-3, el equilibrio entre estos tiene mucho que ver con la salud y el bienestar.
El concepto de cargas glucémicas no se toma en cuenta en la dieta tradicional. Incluso la última versión de la pirámide necesita una revisión a fondo y que de una vez por todas los nutricionistas valoren la importancia de la base evolutiva del ser humano. Para ampliar esta exposición dejo este enlace.
Aquí tenemos otro artículo de una manera muy clara que resume los orígenes de la pirámide nutricional recomendada tradicionalmente y los fallos que en esta